El video muestra como Masdar aborda nuevas tecnologías como plantas de energía solar, y una amplia investigación sobre las posibilidades de generar un futuro más sostenible, buscando un nivel 0 del co2 (dióxido de carbono), uno de los mayores contaminantes, lo cual se puede ver en gran medida en la aplicación a las construcciones, autos eléctricos, energías alternativas, entre otros…

Abu Dabi  es una metrópolis que debe su economía en gran parte a la industria del  petróleo, este a su vez aporta el 8% correspondiente al total del petróleo fabricado a nivel mundial, que se percibe como uno de los mayores contaminantes del planeta, bien sea por su extrema utilización o por sus tecnologías sucias, dejando una gran huella ecológica y gran Emisión de co2, viendo esto, la capital de los Emiratos Árabes da cuenta de que son uno de los mayores contaminantes en el mundo y deciden dar cambio a su perspectivas hacia el desarrollo por el petróleo y se centro en el desarrollo de todo tipo de energías o mecanismos sostenibles.

Teniendo esto en cuenta se dedican a la creación de centros de investigación en los que se busque dar solución a la gran mayoría de problemas ambientales y que tenga una búsqueda hacia el futuro con el fin de disminuir el daño ambiental y la huella ecológica.

 En el caso de las construcciones estos son supervisados con el fin que no se sobrepase el límite ecológico, usando materiales limpios y generando un material nuevo como lo es el cemento de una manera sostenible. el proyecto concentra en el clima de manera aprovechable por paneles solares, captadores de viento, zonas de reciclaje, combustibles ecológicos, entre otros con un costo alrededor de 22.000 millones de dólares. Es así como se da un acercamiento a lo que sería la generación futura de un mundo sostenible.

Con este claro ejemplo podemos ver como aun siendo Abu Dabi uno de los mayores contaminantes, al percatarse del daño ambiental que cada día se hace más irreversible cambia su concepción de ingresos, actual y futura. Por eso es importante darnos cuenta de los daños que a lo mejor no se ven instantáneamente, pero si a futuro, y pensar más en una economía sustentable, y que garantice el futuro de una manera sostenible y amigable con el medio ambiente.

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